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Desafíos y Estrategias en el Manejo de Heridas con Infección Local

¿Qué es la infección de heridas y por qué ocurre?

La infección de heridas es un problema complejo que enfrentan diariamente tanto pacientes como profesionales de la salud. Desde infecciones leves hasta complicaciones severas, abordar esta situación de manera eficaz requiere un conocimiento profundo y un enfoque multidisciplinario.

Primero, es fundamental comprender que todas las heridas están contaminadas o colonizadas por microorganismos, pero no todas desarrollan una infección clínica. Una herida se infecta cuando los microorganismos que la colonizan se vuelven patógenos, lo que generalmente ocurre cuando el sistema inmunitario del huésped se ve comprometido o la carga bacteriana sobrepasa la capacidad de defensa del organismo. Factores como la virulencia de los microorganismos, la extensión del daño tisular y la condición general del paciente (por ejemplo, diabetes, inmunosupresión, malnutrición) influyen en la probabilidad de que se produzca una infección.

El continuo de la infección: Desde la contaminación hasta la sepsis

El Instituto Internacional de la Infección de las Heridas (IWII) es un grupo internacional independiente de médicos, científicos y otros profesionales que trabajan en el tratamiento de las heridas, dedicado a promover el avance del control de las infecciones mediante las mejores prácticas, la educación, la formación y la investigación. La IWII plantea el continuum de la infección, entendiendo que la carga bacteriana va en aumento de forma escalonada.

La infección de heridas se puede conceptualizar en este continuo, que va desde la contaminación hasta condiciones potencialmente mortales como la sepsis. Este espectro incluye:

  • Contaminación: Presencia de microorganismos sin proliferación significativa. Clínicamente, no se observa un retraso en la cicatrización.
  • Colonización: Multiplicación limitada de microorganismos sin causar una reacción significativa en el huésped.
  • Infección local: Los microorganismos están presentes y proliferan dentro de la herida, desencadenando una respuesta en el huésped que puede retrasar la cicatrización. La infección está contenida en la herida y en la zona circundante inmediata (menos de 2 cm). La infección local puede manifestarse con signos y síntomas sutiles que pueden no reconocerse de inmediato como indicativos de infección; a medida que estos signos aumentan comienzan también a manifestarse los signos clásicos de infección.
  • Propagación de la infección: También conocida como celulitis. Los microorganismos invaden el tejido alrededor de la herida, pudiendo afectar tejidos profundos, músculos, fascias y órganos.
  • Infección sistémica: En esta etapa, los microorganismos se diseminan por todo el cuerpo a través del sistema vascular o linfático, desencadenando una respuesta del huésped que afecta al organismo en su totalidad.

El papel del biofilm en las heridas crónicas

Uno de los conceptos clave en el manejo de heridas crónicas es el biofilm, una comunidad estructurada de microorganismos que se adhiere a la superficie de la herida y está protegida por una matriz de polisacáridos. Se estima que el 100% de las heridas crónicas contienen biofilm, lo que contribuye significativamente a la dificultad para erradicar las infecciones y promueve la inflamación persistente.

El biofilm protege a los microorganismos de los antibióticos y del sistema inmunitario del huésped, lo que limita la efectividad de los tratamientos convencionales. De hecho, estudios han demostrado que el biofilm puede formarse en tan solo 24 horas, creando un microentorno que retarda la cicatrización y perpetúa la inflamación.

Signos y síntomas: Identificando una infección a tiempo

Reconocer una infección a tiempo es esencial para un manejo efectivo. Los signos clásicos incluyen enrojecimiento, calor, dolor, edema y exudado purulento. Sin embargo, en las heridas crónicas, los signos pueden ser más sutiles:

  • Tejido de granulación friable: El tejido se rompe fácilmente y sangra al menor contacto.
  • Aumento del exudado: Puede indicar una respuesta inflamatoria exacerbada.
  • Hipergranulación: Tejido que sobresale por encima del nivel de la piel, lo que sugiere un proceso inflamatorio no controlado.

Estrategias de intervención: De la limpieza al uso de antimicrobianos

Un manejo efectivo de las heridas infectadas no solo se enfoca en el tratamiento, sino también en la prevención y monitoreo continuo. Aquí se describen algunas intervenciones claves:

  1. Limpieza adecuada de la herida: La limpieza es uno de los pasos más importantes en el manejo de heridas, especialmente aquellas en riesgo de infección. Usar soluciones antisépticas adecuadas, con un alto índice terapéutico que aseguren una capacidad antimicrobiana elevada sin generar citotoxicidad en el lecho de la herida

2. Desbridamiento regular: Eliminar el tejido desvitalizado y el biofilm mediante desbridamiento es fundamental. Esto no solo reduce la carga bacteriana, sino que también permite que los antimicrobianos tópicos sean más efectivos. La evidencia actual recomienda complementar formas de desbridamiento, puesto que una limpieza continua del lecho de la herida favorece su evolución. Puede utilizarse el desbridamiento cortante al momento de la curación y utilizar apósitos con capacidad de desbridar (como el desbridamiento electroestático) entre las curaciones.

3. Manejo de la carga bacteriana: Cuando se identifican signos de infección, es crucial actuar rápidamente. El tratamiento local precoz mediante apósitos antimicrobianos, como aquellos que contengan plata, puede evitar una propagación de la infección disminuyendo las complicaciones de la herida. Se recomienda el uso de apósitos antimicrobianos con plata por al menos dos semanas y reevaluar los signos de infección y la continuidad de la terapia local.

Factores sociales y un enfoque holístico

El tratamiento de las heridas infectadas no puede verse de manera aislada; es necesario un enfoque holístico que considere factores sociales, ambientales y psicológicos. La educación de los pacientes y cuidadores sobre la importancia de la higiene y la prevención es esencial, al igual que el acceso a recursos adecuados para el cuidado de las heridas.

Implementar un enfoque basado en la evidencia y la prevención puede no solo mejorar los resultados de la cicatrización, sino también contribuir a un mejor uso de los recursos de salud y, lo más importante, a una mejor calidad de vida para los pacientes.

Referencias

  1. International Wound Infection Institute (IWII) La Infección de las heridas en la práctica clínica. Wounds International 2022
  2. R Nair, H. K., Mrozikiewicz-Rakowska, B., Sanches Pinto, D., Physician, A., Stuermer, E. K., Head, S., Sander, J., Luis Lázaro-Martínez, J., Ousey, K., Assadian, O., Kim, P. J., & Percival, S. L. (n.d.). B | WOUNDS INTERNATIONAL 2023 EXPERT PANEL
  3. International expert working group. Appropiate use of silver dressings in wounds. Wounds international, 2012
  4. Best practice for wound debridement Consensus panel Contents. (2024)

    
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